⁣⁣La limpieza del tanque

¿Por qué limpiar y mantener su tanque de gasóleo para calefacción?
  • Debido a que el gasóleo para calefacción es un producto elaborado a partir de materias primas naturales, envejece y, con el tiempo, las sustancias envejecidas se depositan en el fondo del tanque, provocando sedimentos. Este lodo de aceite no debe entrar en el quemador.
  • Porque la humedad ingresa al tanque a través del tubo de ventilación y se condensa. Como el agua es más pesada que el gasóleo, también se hunde hasta el fondo del tanque.
  • Porque con el tiempo se forma óxido en los contenedores de chapa de acero, que se desprende en pequeñas partículas de las paredes y el techo y se deposita en el suelo.
Allí se forma, de forma lenta pero segura, la llamada fase de suelo/lodo de aceite. Es tan agresivo que ataca el acero.
¡La fase inferior corroerá el fondo del tanque si no haces algo al respecto desde el principio!
Los depósitos de plástico y los depósitos con revestimiento antifugas no se oxidan, pero también requieren una limpieza regular y especial, ya que también existe el riesgo de que la fase de suciedad/lodo de aceite sea absorbida y dañe el quemador.
Consecuencias: Mal funcionamiento o avería del quemador, ¡sobre todo en invierno!
Un tanque o sistema de gasóleo para calefacción debe limpiarse cada 5 años con fines preventivos y de inspección.
Si se desea, el funcionamiento de calefacción se puede mantener durante el trabajo utilizando un suministro temporal de aceite.
La ejecución profesional es tan importante para nosotros como la satisfacción de nuestros clientes. La puntualidad y la limpieza se encuentran entre nuestros valores fundamentales.
Estaremos encantados de asesorarle de forma gratuita para encontrar una solución individual.
¡Vea usted mismo!

Obtenga una idea de cómo podría funcionar la limpieza de tanques

1. Preparación del sitio de construcción.
2. Construcción de un contenedor plegable (posible almacenamiento intermedio de hasta 20.000 litros).
3. Bombee el gasóleo aún limpio y utilizable a un recipiente plegable.
4. Aspirar y desnatar los lodos de aceite.

5. Limpieza manual. (Retirando los ánodos viejos si están presentes).
6. Seque el fondo del tanque con un paño. Revise las paredes interiores y el piso del tanque para detectar daños por corrosión.
7. Devuelva el gasóleo aún limpio al depósito limpio.
8. Cerrar el sistema del tanque. Vuelva a poner el quemador en funcionamiento.
9. Elaboración de un certificado de limpieza de depósitos para el TÜV.